Periodismo Libre

En el siguiente ensayo voy abordar cuestiones LGBT, las cuestiones relacionadas a las mentiras de estos grupos utilizadas por personarías políticas.

Antes de empezar me gustaría aclarar que no necesariamente esto tiene que ser un ensayo de tintes religiosos, si bien yo soy una persona religiosa, practicante del catolicismo y defensor de la iglesia, en esta oportunidad no les traigo un escrito teológico sobre la comunidad homosexual, sino que les vengo a compartir estadísticas médicas, posiciones científicas y lógicas, y además todas fácilmente comprobables por ustedes mismos.

Rápidamente contextualicemos esta cuestión, La ideología de género, que no únicamente acuña las cuestiones homosexuales y lésbicas, sino que también plantea una lucha entre mujeres contra hombres, no es una tendencia que nace en la argentina, estas ideas se gestan en intensa lucha intelectual en la universidad de Frankfurt, y de allí, desde la catedral izquierdista sustentada de intelectuales y filósofos es de donde se expande al resto del mundo.

Vamos a caminar un poco por los andenes históricos, donde el mismo Gramsci, quien supo ser un intelectual de la izquierda italiana, estando preso sostenía en sus manuscritos que la revolución debía tomar un rumbo más cultural, en el marco de su escrito “Algunos temas de la cuestión meridional” ¿por qué? Porque se habían dado cuenta de que el comunismo, ya no tenía clientela sujeta al ideario de cambiar al mundo, porque con los avances capitalistas de las potencias emergentes en occidente, ya el obrero no estaba preocupado por cambiar al mundo, sino por cambiar el auto, es decir, ya no tenían la necesidad de combatir aguerridamente contra quienes creían eran sus verdugos, los dueños de empresas, sino que ya tenía mejoras laborales y mejores salarios, por lo que estos, empezaron a dirigir la lucha de clases hacia una lucha más cultural, y esto ya lo predecía el mismo Engels en una carta a su colega y socio Marx.

Es decir que esta lucha cultural es mucho más vieja de lo que nosotros creíamos, pero ¿cuándo comenzó a tomar color? Bueno precisamente luego de la caída del muro de Berlín en 1989, esto ya había sido predicho por el asesino comunista Fidel Castro, advirtiendo que, si el muro de Berlín caía, la revolución debería adoptar cambios culturales y además en el año 1992 formalmente la Unión Soviética deja de existir.

A partir de la caída del muro de Berlín es donde nacen en Sudamérica por su puesto, con la doctrina ideológica y cultural de la resaca resentida de las potencias occidentales, una serie de eventos adoptados por los sectores comunistas, por ejemplo:

1 – nace el foro de sao paulo en Brasil en el año 1990, el cual recoge y financia partidos de izquierda de Latinoamérica.

2 – en el año 1992 el delincuente narcotraficante de Evo Morales encabeza una marcha indigenista en Bolivia conmemorando los 500 años de la llegada de Colón a estas tierras.

3 – entre otros sucesos ocurridos en la década del noventa, en la argentina en 1992 se realizó la primera marcha del orgullo LGBT, que además fueron apoyadas por las madres de la plaza de mayo.

Y en esta última cuestión es la que me voy a detener brevemente.

Las personas encausadas en este lobby no son más que idiotas útiles al servicio de una ideología pretenciosa y anticientífica.

¿Por qué esta ideología es anticientífica?

La conducta de estos grupos no se reduce solamente a las hombre o mujer homosexual, sino que también se suman a sus filas grupos de transexuales, bisexuales, transespecies, transedades, y otros Transformers que, aunque suenen a un chiste, son reales. Hablemos sobre la naturaleza de la relación sexual.

Debido a su propia constitución anatómica, antropológica, fisiológica y

psicológica, el hombre y la mujer se atraen mutuamente tanto espiritual como

físicamente y es precisamente de esa atracción que deriva la prole: la

complementariedad ente los órganos sexuales masculino y femenino no es una certificación convencional, ni un “prejuicio religioso”, ni mucho menos fruto de una estipulación cultural: es una determinación de la naturaleza.

Partiendo de la base de que el objetivo por antonomasia del acto sexual es la

propagación de la especie, es sabido que precisamente para que el ser humano se sienta constantemente motivado y propenso a esa propagación es que la relación sexual conlleva un elevado placer físico, puesto que si no se produjese ese intenso goce que nos motivara a consumarla, la supervivencia estaría amenazada.

Luego, es un dato objetivo que la finalidad principal del acto sexual no es el

placer sino la expansión de la humanidad y que, por ende, transformar el placer en el motivo primario del acto sexual consistiría en sustituir el fin principal por su corolario.

No obstante, ello va de suyo que habitualmente las personas tienen relaciones sexuales no con el deliberado propósito de procrear, de la misma manera en que por lo general todo aquel que se apresta a comer un plato de comida no suele hacerlo con el calculado afán de adquirir nutrientes sino de disfrutarlo: pero es justamente ese disfrute físico que la naturaleza nos proporciona en la vida sexual (tanto como en la alimentación) el que nos incentiva constantemente y tendencialmente a mantener conductas afines o proclives

a nuestra conservación y/o propagación biológica. Y así como en materia nutricional hay quienes tienen una dieta desordenada o autodestructiva —los obesos, los bulímicos, los coprófagos o los anoréxicos, por ejemplo—, en el plano sexual también hay quienes mantienen una sexualidad trastornada o contraria a la naturaleza.

¿Merece un obeso ser obligado a no serlo? Por supuesto que no, es por ello que los terceros deberían abstenerse de intervenir en la obesidad de quien la padece. A no ser que éste pida ayuda, en cuyo caso se acudiría, pero con el fin de auxiliarlo y no de aplaudirle o incentivarle sus excesos: “Si una persona come más de lo que necesita y se ejercita menos de lo que su organismo requiere, sufre consecuencias. ¿Sería incorrecto decir que tal persona, o el fumador o el bebedor excesivos, obran contra su propia ‘naturaleza’? El SIDA no sería, en esta interpretación, sino un castigo más severo (para los homosexuales) que el exceso de colesterol a las conductas irrazonables. Los seres humanos venimos al mundo equipados con ciertas condiciones y tendencias naturales:

acatarlas es prudente y violarlas conlleva un precio”, anotó con buen criterio el pensador argentino Mariano Grondona. Sin embargo, agrega Grondona lo siguiente: “Para una mayoría de las personas la homosexualidad es una práctica aberrante. La pregunta no es empero si tienen razón, sino es otra: aun si la tuvieran, ¿poseen, además el derecho de imponerla a los que no piensan como ellos?”. La respuesta del autor es que no, puesto que “una persona es tolerante cuando, pese a condenar determinado tipo de conductas, no intenta prohibirlas por ley del Estado porque el intento de moralizar imperativamente podría traer males mayores que el que se quiere erradicar”.

Hago un paréntesis: el Estado no debería jamás perseguir la homosexualidad, pero lo que tampoco debería hacer es promover y celebrar dicha práctica por un sinfín de razones, entre ellas, que la misma es auto-destructiva tanto en lo emocional como en lo físico.

Pero lamentablemente es lo que hace el estado a través de políticas que atentan por ejemplo contra los derechos de los padres ante la libre elección de la educación que quieren promoverles a sus hijos, y el caso en Argentina es la llamada ESI, o educación sexual integral con perspectivas de género, y ¿en qué consisten este taller que pronto, si el pueblo no reacciona, intenta imponer el estado? No consiste en la enseñarles a los niños a no discriminar a las demás personas por sus gustos personales, ni tampoco a cómo prevenir un embarazo no deseado, y mucho menos sobre los riesgos que corren al no protegerse durante el coito respecto a las enfermedades de transmisión sexual, sino que, pretenden enseñarle a tu hijo desde los 5 años o antes si lo consiguen que su sexualidad no está determinada por sus genitales, si no por su autopercepción. Imagínense que un buen día viene del jardín, o primaria su hijo o hija diciendo “papá, mamá, ¿Sabías que yo teniendo Pene, puedo ser mujer? O viceversa”. Y ustedes podrán decirme que estoy exagerando, pero por el contrario a eso, los hermanos del Perú ya lo han sufrido, en el año 2017 la justicia peruana falla en favor del colectivo de padres contra el ministerio de educación de aquél país por enseñar estas ideologías a sus hijos sin el consentimiento de los padres. Y recuerden ustedes que la Diputada Victoria Donda a principios de este año afirmo que la ESI con perspectiva de género debe ser enseñada aun sin el consentimiento de los padres, puesto que los niños son sujetos de derecho y esto es totalmente contrario a lo que dice por ejemplo la constitución nacional, cuyo artículo 75, inciso 22 incorpora al rango constitucional tratados internacionales como, por ejemplo, La declaración internacional de los derechos humanos, que en el Artículo 26. 3. Dice que “Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.”

Otros tratados como CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS HUMANOS, articulo 12. 4. Y el artículo 5 de la convención sobre los derechos del niño. Y cite más de un tratado para que después no salga un enemigo de la moralidad diciendo que ese tratado fue anulado por el estado. Incluso como en la argentina a la constitución nacional no se la respeta, para que no llamen al código civil, tenemos los artículos 264.2 y el artículo 267, etc. Que abalan el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos.

Tristemente actualmente el estado que pretende imponer esta ideología anticientífica, sin tener en cuenta que atentan contra la libertad de los padres en oponerse a la ESI, y un claro ejemplo podemos encontrarlo en Canadá, donde recientemente han promulgado una ley en la cual, si los padres se reúsan a que sus hijos sean adoctrinados, los mismos pierden la patria potestad de sus hijos e incluso hasta podrían terminar presos.

También la Ideología de género, atenta contra la libertad Medica. Por ejemplo, en Inglaterra fue una mujer al médico con el estómago hinchado y cuando el doctor le dijo “felicidades señora va a ser madre” esta se enojó alegando que era un hombre, enseguida movilizo al lobby LGBT de aquél país y ahora está prohibido decirle “Señora” a una persona embarazada.

Restringe la libertad del lenguaje, en Francia hay regiones donde ya no se puede decir la palabra “Madmuasell” (señorita).

Restringe la libertad jurídica, y aquí dos casos de dos hombres transedad: un hombre en Canadá de 56 años se transformó en una niña de 6 y fue adoptado legalmente por una familia, pero el caso más aterrador es de Joseph Román, un estadounidense de 38 años que después de abusar sexualmente de tres menores de 10, 9 y 8 años alego ser un niño de 8 años atrapado en el cuerpo de un adulto, y tras ser declarado culpable movilizo a su favor todo el sector feminista y LGBT de Estados Unidos. Esto no es de extrañarse pues quien funda el movimiento Gay en estados unidos no es nada más y nada menos que el fundador de la red de pedófilos más importante del mundo NAMBLA, Harry Hay quien curiosamente también era miembro del partido comunista norteamericano.

Los más contradictorio de todo esto es que la comunidad científica también ha sido acosada por estos grupos, ya la disforia de género no es más una enfermedad psiquiátrica, pero están luchando para que la homofobia lo sea, algo ilógico, porque la homofobia no existe, puesto que, por definición una fobia es, un miedo aterrador a algo, y no existe el miedo a los homosexuales, han acuñado este término para patologizar a quien disienta con las teorías LGBT, es decir la homofobia es un término político y peyorativo con fines de desacreditar la disidencia.

El lobby viene ganando terreno en Argentina desde que el gobierno de la delincuente Cristina Kirchner aprobó el matrimonio homosexual, y esto tampoco existe puesto que el matrimonio viene de la palabra Matrimonium de matriz, es decir que el matrimonio es la unión por la cual, gracias a las cualidades inherentes del vínculo existe la potencialidad de la maternidad. Lo que pasa es que consiguiendo la legalidad del acto antinatural del matrimonio igualitario conseguirían poder legalmente adoptar un niño, un error hasta incluso de los matrimonios heterosexuales que piensan que la adopción es un beneficio matrimonial y en realidad lo que sucede, es que la adopción es un beneficio para el desamparado.

En cuestiones criteriosas, lo que debemos hacer los disidentes es organizarnos para esta lucha. El enemigo continúa siendo el mismo que en los 70` en la Argentina, solo que ha cambiado la guerra armada por la guerra cultural.